Desde el punto de vista botánico, la Sierra del Dobra se encuentra dentro de la provincia Atlántica en la región Eurosiberiana. Paisajísticamente concilia dos conjuntos de comunidades vegetales distintas debido a la enorme diferencia de condiciones ambientales de sus vertientes.
La vertiente norte es fresca y húmeda. Posee suelos generalmente ácidos con praderías para pasto, zonas de matorral donde abunda principalmente el Tojo (Ulex europaeus) y el Brezo (Erica cinerea). En zonas muy localizadas, con menor índice de alteración, se ven ejemplares de Acebo (Ilex aquifolium) y Avellano (Corylus avellana) como los que existen en la subida al castro del Pico L’Oro o en la bajada al Sumidero de Las Palomas.
Las siguientes fotos corresponden a un Tojo en flor y a un Acebo en diferentes fases de crecimiento. Las hojas del acebo se vuelven más duras con la edad. En la última foto podemos ver a un Acebo hembra con los capullos de sus flores aun sin abrir.
Esta ladera norte aparecía tradicionalmente cubierta de robledales (Quercus robur) pero en la actualidad sólo quedan en algunas zonas residuales. Muchos de estos robledales fueron reemplazados por plantaciones de Eucalipto (Eucalyptus globulus) y de Pino de Monterrey (Pinus radiata) utilizados para repoblación forestal. Junto a éstos se encuentran otras especies como el Abedul (Betula pubescens), el Peral Silvestre (Pyrus cordata) o el Castaño (Castanea sativa).
Por otro lado en la vertiente sur, más protegida del viento húmedo y soleada, se pueden encontrar pastos y matorrales de la familia de las rosáceas, como el Espino Blanco o Albar (Crataegus monogyna), el Endrino (Prunus spinosa), la Zarzaparrilla (Smilax aspera) o la Fresa Silvestre (Fragaria vesca).
En las siguientes fotos podremos ver varios ejemplares de un Espino Blanco antes y después de su floración, y los frutos de dos ejemplares de Fresa Silvestre y Zarzaparrila.
Una de las especies más curiosas que podemos encontrar en las laderas sur de la Sierra del Dobra es el Muérdago (Viscum album). Esta planta perenne semiparasitaria crece sobre las ramas de otros árboles. Se la cataloga como semiparasitaria pues usa sus raíces para absorber la savia del huésped mientras que usa sus hojas para hacer la fotosíntesis.
Sus frutos son verdes hasta que maduran y se vuelven traslucidos. Estos frutos son pegajosos, cualidad que utilizan para su proceso reproductivo. Los pájaros, tras comerse las bayas, se limpian los picos que han quedado pegajosos en otros arboles, depositándose así las semillas que se desarrollaran en el nuevo huésped.
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